La vida en el epicentro del conflicto en Oriente Medio

Durante cincuenta años, Palestina ha estado bajo ocupación israelí. Se considera que una de las áreas que más ha vivido el conflicto entre los colonos israelíes y los palestinos es Hebrón, en Cisjordania. ¿Cómo es la vida cotidiana con la ocupación y la política de asentamientos en este lugar?

Por Anja Meunier / 10.3.2017

La construcción de asentamientos suena a algo pacífico. Imaginas casas pequeñas entre tierras de cultivo, construidas por aventureros y exploradores. Sin embargo, la realidad es diferente. Desde que Cisjordania cayó bajo ocupación israelí durante la Guerra de los Seis Días en 1967, los asentamientos israelíes empezaron a proliferar allí. Muchos de ellos en tierras que, desde el punto de vista israelí, no pertenecían a nadie. Sin embargo, gran parte de estas tierras era usada por las comunidades palestinas como tierras comunales que, de acuerdo con la costumbre, nunca fueron registradas en el catastro. En diciembre de 2016 Naciones Unidas adoptaó una resolución, exigiendo el fin de la política israelí de asentamientos y declarandolos ilegales en virtud del Derecho Internacional.

Señal en la frontera de ocupación zona A © Anja Meunier

De hecho, otros asentamientos israelíes han sido construidos en tierras privadas palestinas registradas, lo que también es ilegal según la ley israelí. Pese a ello, sus habitantes se encuentran bajo protección militar y en febrero de 2017 el gobierno israelí aprobó una ley que aprobaba retroactivamente 4000 de estos asentamientos ilegales.

En Hebrón, el conflicto entre los palestinos y los colones israelíes es muy candente. Hebrón es la única ciudad en Cisjordania donde hay un asentamiento israelí directamente en el centro de la ciudad. Esta zona es particularmente importante para las tres religiones monoteístas porque en ella están enterrados los tres patriarcas; Abraham, Jacob e Isaac, en la Tumba de los Patriarcas de la ciudad vieja. La proximidad a estos sitios sagrados, así como los elevados beneficios sociales que el estado israelí paga a los colones, hacen que los asentamientos de Hebrón sean muy atractivos para los judíos ultra-ortodoxos.

Parte del viejo mercado en el centro de Hebrón © Anja Meunier

El asentamiento en el centro de la ciudad – donde viven unos 500 colonos judíos – se desarrolló como consecuencia de la ocupación ilegal de casas palestinas privadas. Debido a la tensión entre la población palestina y los colonos israelíes, estos están protegidos por unos 3000 soldados. Bloques enteros de calles son inaccesibles a los palestinos y están acordonados por puestos de control. La antigua calle del mercado está ahora casi desierta. Según los datos de B’Tselem, un centro de información israelí sobre los derechos humanos en los territorios ocupados, el 42% de las casas palestinas en la ciudad vieja de Hebrón están vacías u ocupadas por colonos y el 77% de las tiendas han sido cerradas.

Ghassan se crió en la ciudad vieja de Hebrón

Ghassan tiene 20 años y se crió en la ciudad vieja de Hebrón. Es el dueño del “Hostal en Hebrón” y le da tours políticos por la ciudad vieja a los pocos turistas que vienen a la ciudad. Él nos enseña las calles cortadas, donde la basura se amontona detrás de vallas de alambre de espino, y nos cuenta cómo la gente que aún vive aquí es acosada y discriminada. “La gente de Hebrón tiene miedo a venir a la ciudad vieja, porque aquí los soldados les paran y les acosan. No quieren que la gente venga, por eso te causan dificultades, te piden tu identificación todo el tiempo o te paran durante horas sin razón alguna, sólo para que no vuelvas”. Hay edificios que tienen una tienda palestina en la planta baja y un colono israelí en el piso de arriba. A veces desde arriba arrojan basura, rocas e incluso lejía y orina, nos explicó Ghassan.

Malla de protección frente a las rocas y la basura © Anja Meunier

Muchas familias se están mudando a la parte nueva de la ciudad para escapar de las inspecciones constantes y del persistente acoso. “Cuando creces aquí no ves muchas cosas bonitas, ves a todos los soldados israelíes, todas las fronteras israelíes, todos los colonos israelíes que van por las calles con sus pistolas y que te acosan”. Pero la familia de Ghassan aún vive en el centro de la ciudad. “Si abandonamos nuestra casa, los colonos se mudarán a ella y ganarán de nuevo más territorio”.

Puesto de control en el límite de la ciudad vieja de Hebrón © Anja Meunier

Visitamos a Carol de Christian Peacemaker Team, un grupo activista internacional, que vive en el centro de Hebrón. Ellos observan y documentan la situación y, si es necesario, intervienen pacíficamente. Carol es una señora de pelo canoso, a la que me hubiese imaginado antes en el salón de casa de mi abuela que en una zona de crisis ocupada militarmente. Pero cuando empezó a hablar, esta impresión inicial desapareció inmediatamente. Lo hacía de forma rápida y decidida y desprendía una energía calmada.

“Por supuesto, solo tenemos oportunidades limitadas de intervenir”, dijo, “pero a veces lo único que hace falta es que un agente externo internacional esté allí. Cuando hay espectadores, el comportamiento suele cambiar”. Es de esta forma, por ejemplo, como Carol y los demás activistas protegen a los niños en su camino a la escuela de inspecciones excesivamente largas y de otras medidas represivas. A ellos les avisan inmediatamente amigos y vecinos si hay un arresto o un conflicto importante en algún lugar; los miembros del CPT intentan entonces suavizar la situación. Además de asistir directamente sobre el terreno, los activistas también documentan los eventos e informan a organizaciones de derechos humanos y a las Naciones Unidas.

Vistas de Hebrón © Anja Meunier

Ghassan espera que el conflicto acabe pronto, no le gusta la resistencia violenta ni las manifestaciones. “No voy a manifestaciones porque solo puede pasar una de estas tres cosas: acabas herido, asesinado o arrestado”. En cambio, él intenta informar en sus tours a las personas de otros países sobre la situación en Hebrón. “Quiero que la gente conozca las dos caras; la israelí y la palestina. Los medios de comunicación no muestran lo que está pasando aquí.”

No sólo es que apenas haya informes en el plano internacional sobre las condiciones en las que la gente vive en las áreas ocupadas por Israel, sino que muchos israelíes tampoco saben lo que está pasando. Por ello, la Organización B’Tselem ha lanzado un proyecto, repartir cámaras entre los palestinos que viven en las áreas donde las tensiones son mayores y su intensificación es común. Quieren contrarrestar los informes unilaterales y revelar violaciones de los derechos humanos en esas zonas. Ghassan también espera que esta iniciativa sea un éxito. “El mundo piensa que somos terroristas y criminales. Pero no es así. Somos gente agradable y amistosa que desean un futuro mejor. Somos seres humanos como el resto del mundo. Queremos libertad y queremos una vida buena, y sentirnos seguros cuando vamos a casa.”

Autora

Anja Meunier (Alemania)

Estudia: Matemáticas y Económicas

Lenguas: Alemán, inglés y español

Europe tiene… países bonitos, gente interesante y un estilo de vida genial. Y necesita mantenerse unida.

500px: Anja Meunier

Traductora

Soledad Román Pérez-Moreira

Estudia/Trabaja: Derecho y Ciencias Políticas y de la Administración

Habla: Español, inglés, francés, alemán, algo de italiano

Europa es…un sueño multicultural por cumplir

Twitter: @dadelosnamor

Blog: http://sromper.blogspot.de

Revisora

Miriam Vázquez (España)

Estudia / Trabaja: Periodismo y Ciencias Políticas y de la Administración

Habla: español, catalán, inglés, algo de francés y alemán

Europa es… un lugar único donde convive gente de diferentes culturas, idiomas y puntos de vista

Twitter: @mirabroad

Author: Anja

Share This Post On

Submit a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

css.php